Los servomotores lineales son motores que se mueven en línea recta en lugar de girar. Tienen muchas ventajas sobre los motores rotativos tradicionales, como mayor velocidad, aceleración y precisión, menor fricción y desgaste, y un diseño mecánico más simple. Los servomotores lineales pueden alcanzar velocidades de hasta 10 m/s y aceleraciones de hasta 100 g, manteniendo una precisión de posicionamiento submicrónica. Los servomotores lineales se utilizan ampliamente en aplicaciones que requieren un control de movimiento de alta velocidad y alta precisión, como la fabricación de semiconductores, el corte y escaneo por láser, las imágenes médicas y la biotecnología.